Yo sé que no es costumbre regalar una rosa
que ya se ha marchitado,esperando
las caricias de una suave mano…
de mujer.
Pero es que la he guardado
desde entonces…por años,
con celos egoístas,
y lágrimas de sangre
que no me dejaban ver
lo tanto que pudiste lastimarme;
Y hasta hoy es que pude…
hacértela llegar.
Aquí tienes la rosa que un día me pediste
aquella hermosa tarde cuando te conocíy que corrí a cortarte…
alegre,
enamorado;
y tú no me esperaste
cuando volví por ti.
No hubo rosa más grande
y hermosa…que diera aquel rosal
de mi humilde jardín,
ni hubo jamás una prosa
que pudiera elogiarla
porque era para ti.
He recorrido el mundo…
cada rincón de élsiguiendo tú perfume,
el halo de tu ser,
sin suerte…
y sin descanso
hasta desfallecer,
y nunca apareciste mujer…
para entregarte esta rosa...
que ha llegado
a quemarme la piel.
Tenla sí…
es tuya,siempre fue para ti.
Perdona si no pude hacerla revivir
porque murió una tarde
cuando mi amor por ti
ya no tuvo sentido…
y te dejé partir.
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